Capitulo Cinco: Amarga peste
martes, 21 de agosto de 2012 ? 2 Opiniones ?
Primera Parte: Haley
―no te olvides de tus medicinas―me recuerda mamá en el
desayuno, asiento a ella con mi mirada en el tazón de cereales, hoy no tengo
mucha hambre, he tenido que volver al instituto después de una semana de descanso en casa
desde mi supuesta “caída torpe del autobús”. Mamá le ha pedido a Zac, mi doctor
de cabecera, que viaje hasta Londres pero él no ha podido así que me ha pedido
una semana en reposo.
Cuando ya estoy en la parada del
autobús Ethan se acerca a mí con mi chaqueta
―Has dejado tu chaqueta―la tomo de su mano
dándole un “gracias”
― ¿Segura que puedes aguantar unas horas sin mami? ―su sonrisa se hace grande
Sí, he estado en la cama con toda la
atención de mamá en mi y si, también Ethan ha estado revoloteando por allí para
burlarse un poco de mi
―Pensé que no querías que nos vieran juntos
―aun estoy firme en ello Boo―oh si, el aun me llama
Boo
―deja de llamarme así―un golpe y él está lejos de mi―el bus de la escuela
estará en minutos aquí, cállate si no quieres que te vean conmigo
Ethan ríe un poco y se aleja al aviso
de coca cola
―últimamente andas muy gruñona hermanita―ambos agriamos el rostro
ante aquella afirmación
―creo que voy a vomitar
―a tu izquierda―señala la dirección contraria a él arrugando su nariz
Hago algo con mi dedo intermedio
dedicándoselo por completo a él
― ¿Por qué me apuntas? ―bufa―baja tu dedo, allí viene el autobús
Lo hago solo porque estoy de acuerdo
con su trato de “no te conozco” en la escuela
Me subo al autobús tomando el mismo
asiento de la primera vez esperando no encontrarme con… ¿cómo es que se
llamaba? Bueno con aquella chica plástica
Cuando he llegado a la escuela
encuentro junto a mi casillero a Kiara,
―Haley―ella alza su mano saludándome―viniste
―Vine―digo sin mucho animo
― ¡faltaste una semana entera! ―ella parece un poco
molesta
―bueno creo que eso ya lo sabía
― ¡Haley! ―ella ahora esta gritando― ¿Por qué no llamaste?
― ¿Uhg?
―pensamos que después de la discusión con Zoey habías decidido retirarte
del instituto, bueno yo no lo pensé mucho pero Missi insistía en que era así,
aunque créeme que la contradije desde…―miro los labios de Kiara,
no entiendo nada de lo que dice porque está hablando tan rápido que me parece
increíble que siga respirando―así que ahora aquí estas―sonríe―debiéndome una explicación
― ¿Explicación? ―abro mi casillero y dejo allí los libros que no necesito
―desapareciste una semana entera, te he estado esperando aquí mismo todos
los días, creo que me la merezco
― ¿no te cansas de hablar tanto?
Matemáticas es mi primera clase ¿Salón?
Bueno no tengo idea
―no―Kiara pone sus manos sobre sus caderas
― ¿sabes en que salon es matematicas?
―B314 y no evadas mi pregunta
―¿Quien
la esta evadiendo?
―tu lo estas haciendo Haley
Sonrio,
Kiara parece fastidiada
―estuve en cama, he tenido un accidente
Ella
pone sus dos manos sobre su boca ahogando a un grito proximo
―Haley―me mira de arriba abajo esperando notar algún indicio de pie roto,
nariz torcida o lo que sea―¿Que te ha
ocurrido chica?
―mmm básicamente me he …―recuerdo la excusa que ha dado
Ethan y me parece demasiado estúpida para dársela también a Kiara―caido por las escaleras pero estoy
bien ahora
― ¿Por qué no llamaste? Nosotras te hubiéramos visitado
―sí, claro que lo hubieran hecho―suspiro dando por terminado el tema,
miro a mi alrededor aun no conozco bien el instituto, espero no tener problemas
para llegar a mi aula
― ¿Quieres que te cuente que ha pasado desde que te fuiste? ―Mi nueva amiga esta sonriendo haciendo
que en sus mejillas se formen dos hoyuelos
―no me interesa que pase en la magnífica vida de los estudiantes―le recalco
―tendremos una excursión en pocos días―primera cosa que debo saber acerca de
Kiara: Nunca escucha―era un secreto hasta que Zoey lo ventilo en la práctica de
porrismo
― ¿Eres porrista? ―levanto mi ceja, Kiara tiene una estatura de 1:59 , tiene
una buena forma física, parece que su madre no le ha heredado pechos pero aun así
tiene todo el físico para ser una activa porrista de la institución , aunque no
puedo imaginarla como una loca maniática gritando todo tipo de estupideces a
los jugadores
―si―ella duda al darme su respuesta, como
si de alguna manera yo fuese a burlarme de ella
―genial―Kiara me mira extraño―ahora tengo clases, nos vemos en el
almuerzo
Paso de ella antes
de que pueda decirme algo mas, mi cabeza comienza a palpitarme a mitad de la
clase de matemáticas, no estoy entendiendo los logaritmos que están escribiendo
en la pizzara y tampoco me interesa, no conozco a nadie en el salón y el
absurdo calor que comienzo a sentir me está desesperando, pido permiso para ir
al baño y el maestro me lo cede sorprendiéndose
de lo mucho que estoy sudando, lavo mi rostro y mis brazos, lanzo mi chaqueta
al suelo, mis manos pican así como mi cuello, me mantengo un buen rato en el
agua esperando que todo mi sistema se calme, cuando lo hace regreso al salón solo
ha tomar mi mochila, porque el timbre ya ha sonado
― ¿Haley? ―escucho que me susurran muy cerca del oído, es Ethan con su frente
arrugada, me da señales de que le siga pero no lo hago y entonces el toma mi
mano entre la marea de estudiantes, me giro pensando que todo el mundo nos observa,
pero todos parecen perezosos para el chisme el día de hoy―estas pálida―bajamos las escaleras y en un rincón donde
la luz está ausente me acorrala―también tienes fiebre―sus manos pasan suavemente por mi
frente
―no es fiebre, solo tengo un poco de calor―susurro alejándolo un poco de mi, su
figura se está tornando borrosa
― ¿Has traído tu medicina? ―le indico mi mochila, el busca entre
los distintos bolsillos hasta que da con las pastillas―no debiste venir si aun no te sentías bien
Me sostengo con la
pared
¿Porque el mundo está girando tan rápido?
―deja de dar vueltas Ethan me estas volviendo loca―alargo mi mano hasta su hombro pero lo único
que toco es su pecho
―no estoy dando vueltas y creo que estas a punto de desmayarte
―no supongas cosas, debe ser un tonto mareo, dame la medicina―dejo mi palma hacia arriba pero Ethan
abre mi boca y como si fueran dulce mete en ella las pastillas, son amargas y
totalmente asquerosas, me las trago con esfuerzo
―tenemos que llevarte a la enfermería―cierro mis ojos y raspo mi lengua con
mis dientes―debemos esperar que todos se hayan ido
―estoy bien―musito sorbiendo por mi nariz antes de que Ethan
inesperadamente me levante en sus brazos como aquella vez que resulte herida en
la pelea, la diferencia es que esta vez si necesito de su ayuda para
movilizarme
Annie-London